Acabamos de volver de nuestras vacaciones.
Aunque en agosto solemos tomarnos unos días libres todos juntos, las vacaciones familiares, las de verdad, las nos saben a verano y nos recargan las pilas, esas, esas son en septiembre.
Hace ya algunos años que decidimos que septiembre sería nuestro mes de vacaciones.
- En agosto es cuando mejor podemos disfrutar de Madrid. Es verdad que hace mucho calor en agosto, pero…¿donde no?
- Disfrutamos de jornadas reducidas en el trabajo, donde además se respira el «buen rollito» de que las vacaciones se acercan.
- Si nos fuéramos de vacaciones en agosto (a levante, donde nos gusta ir) saldríamos del «mogollón» de gente para meternos en «otro mogollón».
- El mes de septiembre nos permite disfrutar de temperaturas más agradables.
- Durante setiembre puedes disfrutar de cierta «exclusividad» en playas, restaurantes….
- Nos ahorramos las caravanas y «operaciones salidas».
- Nuestro verano empieza cuando termina el de la mayoría, así que parece que «alargamos» un poco más el verano.
El año que viene, repetimos.
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