Nuestra casa es el lugar donde vamos a retomar fuerzas, donde nos tenemos que sentir comodos. Pero para ello necesitamos rodearnos de orden y limpieza.
Si tu vida se encuentra totalmente desorganizada, probablemente te sientes frustrado y en un caos diario. Incluso sentiras que no tienes tiempo para organizarte.
Pero para poner tu casa en orden, solo necesitas encontrar pequeños huecos de 10 minutos a lo largo del dia. Con estos pequeños espacios de tiempo, podrás cambiar tu casa y dejar de vivir en el caos.
Pon en marcha el cronometro. Una vez que los minutos hayan pasado, es tiempo de olvidarte de ordenar por el momento, hasta que vuelvas a encontrar esos otros 10 minutos con los que puedas pasar a una nueva tarea.
Un hogar organizado nos llena de energia.
En una casa limpia y organizada, serás más productivo y notarás que llevas el control.
Limpiar el bolso.
Coge el bolso que sueles usar con mayor frecuencia y vacialo sobre la mesa. Coge uno por uno cada producto que hay sobre la mesa y, antes de volver a colocarlo dentro del bolso, asegúrate de que ese es el sitio donde debe estar.
Deshazte de todos los tickets caducados, pañuelos usados, muestras de cremas, listas de la compra arrugadas…Ordena las cosas en pequeñas bolsas o neceseres, de tal manera que sea fácil encontrarlos dentro del bolso.
El bolso es el lugar al que recurrimos constantemente a buscar el móvil, la cartera, las llaves…. Tenerlo ordenado te hara sentirte bien cada vez que vuelvas a él.
Para poder tener el bolso en orden, tendrás que repetir esto al menos, una vez en semana. Pero el cambio merece la pena.
Da la vuelta a tu armario.
Si lo que quieres es comenzar el dia sin estrés, el armario o vestidor tiene que ponerte las cosas fáciles.
Vestirnos es una de las primeras cosas que realizamos cada dia, por eso, debemos prestar atención a como esta nuestro armario. Si cada dia decidir que es lo que te pondrás supone un momento de estrés, lo más probables es que este estrés te acompañe el resto del dia.
Ordena tu armario para que no haya prendas fuera de su lugar y liberate de todo aquello que no usas. Si quitas de la vista las prendas que no te pones, facilitarás la elección de ropa, que quedará reducida a solo aquellas prendas que te quedan bien y con las que te sientes comoda. Si usas solo estas prendas, lo más probables es que a la primera, aciertes con el look que mejor te sienta.
Crea una carpeta para los papeles de casa.
Cuando recibimos una carta del banco, de la empresa de la luz, del teléfono….solemos abrirla antes de llegar a casa y dejarla, según hemos llegado, en la primera superficie que encontramos. La mayoría de las veces, no sabemos donde colocarlas y andan dando vueltas de lado a lado hasta que, con suerte, finalmente decidimos deshacernos de ellas.
Para que esto no pase podemos aligerar el numero de cartas que llegan a nuestra casa solicitando la factura electrónica en todas aquellas empresas que tengan este servicio.
Si no puedes conseguir la factura electrónica y necesariamente tienes que seguir recibiendo cartas, asegurate de que realmente necesitas conservar la factura (en muchas ocasiones valdrá con el resguardo del banco para justificar el pago), de lo contrario, tirala una vez comprobado que es correcta.
La publicidad, deberá ir directamente a la basura. Si hay alguna oferta que te interesa conservar, puedes hacer una foto con tu móvil y quedarte solo con la versión digital.
Para todos aquellos papeles que necesariamente tengamos que seguir recibiendo, lo ideal es que cuentes con un archivador con separadores según la temática (casa, coche, colegio) y vayas guardando cada papel en el lugar que le corresponde.
Vacia las encimeras y superficies de apoyo.
Las encimeras son el lugar perfecto donde amontonar todo tipo de objetos. Te sentiras mucho más organizado si las superficies se encuentran libres de objetos.
Dedica 10 minutos cada dia a vaciar y limpiar las encimeras de casa (cocina, baño, superficie de las mesillas, mesa del comedor…)
Haz la cama
Esto es algo que deberíamos hacer cada dia. Solo te supondrá 5 minutos cada dia, pero te ayudará a sentirte mucho mejor cada vez que vuelvas a la habitación.
Busca una ropa de cama cuidada, que te haga sentirte bien. Coloca cojines de distintos tamaños para hacerla más apetecible.
Evita dejar encima de la cama prendas de ropa o cualquier otra cosa.
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